28.3.07

Recuerdos

Anduve leyendo una nota por ahí, sobre eso de que tejer está de moda. Una nota de Perú creo que era, hablando de las mujeres de EEUU que se reúnen para tejer y chusmear. Lo ví en blogs de España también, quedadas le dicen.
También encontré una nota en La Nación, donde dá direcciones para aprender a tejer... O perfeccionarse, no?

Me acuerdo cuando aprendí a tejer. En realidad siempre tuve intentos fallidos y después la consumación del hecho.
Lo primero que quise fue aprender a dos agujas, era lógico, siempre la ví a mi abuela tejerme pulóveres llenos de trenzas (u ochos), me encantaba. Todos en mi colegio tenían cardigans, pero aún así yo prefería usar esos sacos y pulóveres. Jajaja... Encima mi abuela me los hacía para que me duren años y años. Incluso el último que me tejió todavía me va, y grande... Aunque quizás con la panzota ya me quede bien =)
Mi abuela me enseñó con cierta dificultad, porque claro soy la única zurda en la familia (tengo entendido que mi viejo es un zurdo frustrado =/) Me acuerdo que me llevé de su casa unas agujas de madera preciosas que nunca devolví, tejí una cosa gris que quedó a mitad de camino de ser bufanda, claro, me comía puntos, agregaba puntos... Eso fue a los 8 más o menos. Renuncié hasta unos años después. Habré tenido 15 años o más cuando retomé. Empecé a tejer una bufanda negra! Jajaja... Se sabe que con negro no se empieza, pero bueno, pude terminarla. La guardo con mucho mucho cariño, mi primer bufanda tejida por mí en punto santa clara. Era muy gracioso porque a mi hermano también se le había dado por tejer. Logró tejer gran parte pero nunca la terminó. Una pena.
Después de eso tejí una bufanda larguísima de color lila, un chaleco y blá blá blá.
A crochet me enseñó mi tía Lidia. Intenté a eso de los 12, o quizás fue antes no me acuerdo... Sé que tejí unas muestras de abanicos, de medio punto, de vareta doble. Había aprendido. Pero no lo puse en práctica y se me olvidó todo. =/ .
Arranqué de nuevo a los 15, 16, con carteritas, bufandas, gorros... Mi tía me tuvo que volver a enseñar, hasta me regaló una aguja, que es mi aguja preferida.
Y empecé a tejer más cuando empecé la facultad... jajaja... era muy gracioso, porque al principio andaba con el par de agujas, que se sobresalían de la mochila, tejía bufandas en el tren camino a la facu. Después como ya se me hacía incómodo andaba con mi agujita de crochet tejiendo carteras, una manta hermosa para Agustina, la hija de mi amiga, intentos de bufandas (porque las dejaba en el camino), unas boinas... Me miraban como a un alien... jajaja... De hecho un par de amigos me decían que parecía una abuela... jaja
A veces, ahora incluso, cuando tejo en el colectivo me miran así. No sé si por eso o por curiosidad.
Gracias a mi abuela y a mi tía, tengo las herramientas para tejerle a mi bebota.
Cuando incursioné en el telar, tuve una profesora de antropología que dijo algo que me re quedó. Que lo tejido es como una segunda piel, porque nos protege y nos abriga, y que por eso tejer para alguien amado es tan importante, es como darle un abrazo constante. =)
Gracias a mi abuela y a mi tía, sé tejer. Gracias a ellas, mi bebota va a tener un abrazo constante por tres, porque detrás de mí, están ellas también.

7 comentarios:

SOLO CROCHET dijo...

es toda una terapia el tejido, a mi el crochet me fascina porque se logran cosas muy bellas, me causa gracia lo que decias de tejer en el colectivo, yo todos los dias tejo en el tren cuando viajo a mi trabajo, me pongo en un rinconcito y hasta parada saco la aguja de mi bolsita y arranco con el tejido, por lo menos se me acorta un poco el viaje!!!!!

Carl@ dijo...

A todas nos pasa lo mismo con el tejido!
Y lo de tejer en el micro yo empece a hacerlo hace poco y la gente te mira como bicho raro.
Te invito a pasar por mi blog.
Un beso

Anónimo dijo...

sos una ternura Romi
a mi me regalaste algo tb, te acordas? un monederito tejido color naranja, que todavia uso y cada vez que lo saco digo: "Esto me lo regaló Romina" jajaja
te quiero un montón

Roma dijo...

jeje... Sil, a mi me pasa lo mismo, hay veces que cuando tarda mucho el colectivo en venir, saco la aguja y me pongo a tejer... jjaja... se me complica cuando el tejido se me hace muy grande. Y tejer es asi, una terapia acorta tiempo, mirá una amiga me dijo que quiere que le enseñe porque dice que eso la va ayudar a distender la mente, y hacerla descansar un rato de los problemas... totalmente de acuerdo. =)

Anónimo dijo...

hola romina, me dio mucha risa y mucha ternura cuando contas como aprendiste a tejer, sabes que? a mi me paso lo mismo, porque yo tambien soy zurda, y me enseño mi abuela, con infinita paciencia y como ella era derecha, yo me sentaba enfrente y la imitaba, pero al revez! tipico la bufanda en punto santa clara y con mas "ventanitas" que un conventillo jaja, esta bueno recordar eso, porque ademas de hacerlo porque te gusta, es como que continuas una especie de legado no? bueno, te mando un beso, chauu

Vivi Briongos dijo...

Qué bonito lo que decís!!!! Me llegaste al corazón... porque a mi me enseñó mi abuela también...

Besossssssssssssssssssss.

Anónimo dijo...

Hola!!!!
te cuentoq ue soy de argentina pero ahora estoy viajando... ahora estoy en inglaterra y me quedo aca 6 meses por que estoy trabajando para despues seguir viajando...
durate mi tiempo aca queria hacerme un sweater... pero queria hacerle unas trenzas adelante y no se como se hacen.... vos me podrias explicar o pasarme algun linck donde expliquen bien como hacerlas?
a mi tambien me ense;o mi abuela tejer cuando tenia 12... ahora tengo 18... jajaja y nunca supe como hacer trenzas!! y aca no esta ella para ense;arme!
bueno !
muchas gracias!!!
Bre
bre_cita@hotmail.com